Monseñor Víctor Hugo Basabe, explicó “no será ella quien nos visita por vez 165 un 14 de enero, sino que la visita, esta vez en peregrinación virtual, la haremos nosotros a su santuario. Este año de manera extraordinaria tomaremos un sentido distinto en nuestra procesión, motivado por las actuales circunstancias que nos azotan”.
Las actividades comenzarán a partir del 6 hasta el 14 de enero donde “cada día significará un paso de cercanía a nuestra madre que deseosa nos espera” expresó Basabe.
La Divina Pastora será bajada de su nicho el 5 de enero. No lucirá un vestido nuevo sino uno usado en festividades anteriores, el cual será escogido por votación de la feligresía a través del portal web de la Arquidiócesis.